jueves, 6 de abril de 2017

Un destino tallado

EL DESTINO TALLADO


      En la casa de Manuel, mi amo, yo trabajaba como carpintero, yo hacía lo que él me pidiese tanto como juguetes a nombres tallados en maderas, o de animales a estatuas. Yo normalmente me fijaba muy de cerca a qué hora Manuel se hiba de compras a la ciudad, a qué hora él volvía y en especial cuando el dormía, ya que mientras el dormía yo me escabullía a la cocina en busca de comida, no sacaba mucho para que no sospechará nada y me aseguraba de que todo quedara tal como lo encontraba, sin embargo una noche él se levanto a buscar una botella de vino y me encontró con las manos en la masa, no lo pensé dos veces y escape con lo que pude, pero mientras corría todo lo que me llama se fue cayendo y termine sin nada, entonces me decidí en ir a la ciudad. 

      Cuando estaba por llegar me decidí en ir en busca de comida y si logró conseguir otro amo en la ciudad de Barvena. Cuando llegue a la ciudad le pedí al carnicero si me podría regalar un trozo de carne ya que me había gastado toda mi plata el mes pasado para comprar ropa nueva para soportar el frío, sin embargo el carnicero no me quiso ni regalar ni el más mínimo gramo de carne de todas la que tenía entonces decidí en ir a otro lugar, pero cuando estaba por irme el carnicero me regalo un trozo. Cuando hiba caminando por la ciudad pensando en que hiba hacer con mi vida pero mientras dije eso vi a un conocido siendo sentenciado a muerte por no tener un amo, entonces un guardia me mira y se comienza a acercar a mi, yo me di media vuelta y me fui corriendo sin contestar y me escondí detrás de una muralla a unas casas más adelante; Después de todo ese revuelo me decidí en ir a buscar un nuevo amo entonces tome rumbo a la cantina a buscar un amo nuevo, aún cuando me habían rechazado por quinta vez no me rendí y estuve 1 hora preguntándole a la gente si necesitaba a un trabajador, entonces tire la toalla y me fui a buscar un lugar a donde dormir, y justo al dar un paso un hombre me llama y me dice que necesita a un trabajador, y tuve un buen presentimiento. Mientras hibamos en camino a su casa él me pregunta:
-¿y tú a qué te dedicas?
-De carpintero- conteste yo- hago esculturas de madera, animales, tallados lo que usted quiera.
-Interesante, y a todo esto como se llama?, me quedé callado y le conteste 
-Félix- le dije 
-Bueno Félix vas a tener mucho trabajo al llegar.

Cuando llegamos al hogar era una casa muy grande llena de árboles alrededor, ahí me di cuenta de que en realidad hiba a tener trabajo, me dejo entrar y me llevó a mi dormitorio y me dijo:
-Bueno Félix acá vas a dormir y si necesitas algo me lo pides y la comida está en la cocina.
Ahí me di cuenta de que sería de verdad bueno. El me conversaba todas las tardes sobre cómo estaba yo y como me sentía, yo siempre le contestaba que estaba muy bien, una de las noches me quede despierto pensando sobre cómo era yo cuando le robaba comida a mi antiguo amo y me prometí no hacerlo más. Después de unas semanas de trabajar le hice animales como un oso, un águila y también un caballo de madera para poner de estatua afuera de su hogar, y apesar de  de todo el trabajo me gustaba me sentí como en un hogar de verdad. Un día me levante para hacerle un trabajo especial de madera, un dragón de madera tallado a la perfección, pero cuando fui a entregárselo a a mi amo me llevo la sorpresa de que estaba muerto con un cuchillo en el pecho y cuando me volteo hay dos hombres y me dicen:
- ¿Tu conoces a un Manuel ?-yo nervioso me quedo callado.
-No, no sé de qué hablan.
-Bueno el si te conoce y sabemos lo que hiciste 
Y después uno de los hombres saca una espada de debajo de su capa y me apunta y me dice:
-Y nos con unas instrucciones muy claras de lo que tenemos que hacer ahora contigo.
Ahí fue cuando me di cuenta de que el destino me tenía un final pensado en todo lo malo que hice en mi pobre y miserable vida.